En el desahucio de Rocio en C/Benamargosa, 4 (que por cierto se ha parado) la policía golpea mi cámara por el solo hecho de hacer mi trabajo y de documentar lo que pasa en España y por ser prensa libre. Por cierto, el que me golpea no tenia su número de placa visible. Imágenes de Michele Cristofoletti.