Saber de mi rostro
Para qué señores?,
Yo no ocuparé las planas de estiércol
De prensa farandulera,
Ni revistas literarias
De letras reaccionarias,
Saber de mis manos
Para qué señores?
Si yo no firmaré recuerdos en servilletas
No quiero desperdiciar la tinta
Ni menos seré parte de sueños húmedos
De adolescentes burguesas.
Saber de mi nombre,
Para qué señores?,
Si en la librería de saqueos al saber
Mis municiones no estarán en vitrinas,
Búscalo en tus muros, historia, en tu lucha
Acaso las capuchas no te cantan versos.
Saber de mi biografía
Para qué señores
Si mis rutas son las tuyas,
Las mismas derrotas, las mismas victorias,
¿¿¿Saber… Qué quieres saber???
Si al que lees, es a ti mismo…
O no sabes que eres oprimido,
No te han dicho que eres explotado,
Parece que tus juntas tampoco lo saben,
Ellos pareciesen no sentir.
Sólo ten claro,
Cuando leas algo de este servidor y servido de miserias,
aunque sea para amigarte con el sueño,
Aunque sea,
para deshacerte del mal invitado aburrimiento,
Y ese este firmado por hijo de puta, gloria a estas últimas,
Que mis pies tienen barro,
Mis manos el calor de un cañón,
La rabia, el odio, el amor y la ternura
Danzando sin ídolos, ni premios, ni bestias arrodilladas.
Permiso a su saber,
Señores aquellos que se venden como tales,
Compañeros que se construyen como tales,
Pero trabajo incendiando conciencias,
Ese es el compromiso con el mañana
Esa es mi acción de amante con el papel,
Por eso,
La entrada es negada a alfombras rojas.
Hijodeputa
Amor y Anarquia
«Que una palabra verse como fusil, que mi fusil versa palabras de libertad»
Taciturno en lucha III