Alrededor de las 9:30 de la mañana del viernes 30 de marzo de 2017, aproximadamente 30 anarquistas y antifascistas armados con martillos, hachas y pintura roja y negra atacaron la sede del partido neofascista Amanecer Dorado en Atenas (Grecia), a pesar de su proximidad al Pentágono griego, la sede de la policía antidisturbios, la sede de la policía de Atenas, el Ministerio de Orden Público y la academia de policía, es decir, en una de las zonas más protegidas de la ciudad, demostrando que incluso el objetivo más imposible es posible si se tiene la voluntad.