A partir de la década de los setenta del siglo XIX, debido a la fuerte represión ejercida por los Estados contra el movimiento obrero y sus organizaciones, las/os anarquistas ven la necesidad de inspirar el modelo de grupo de afinidad, debido a las garantías de seguridad que este tipo de organización otorgaba. Ya entrado el siglo XX, los grupos de afinidad adquieren en España una importante relevancia, sobre todo a partir de los años 20s. El Estado y la patronal a través del Sindicato Libre, asesinan y hostigan a los miembros de las organizaciones anarcosindicalistas. Ante estos ataques represivos por parte del Estado y la Patronal, algunas/os anarquistas deciden dar una respuesta, y para ello recurrirán a los grupos de afinidad.
Por Paco Madrid